Organizaciones no gubernamentales internacionales informaron que enfrentan restricciones para continuar su labor en la Franja de Gaza, luego de la aplicación de un nuevo procedimiento de registro impuesto por el gobierno de Israel.
De acuerdo con datos oficiales, 14 organizaciones no obtuvieron autorización para operar, mientras otras permanecen en proceso de evaluación, lo que genera incertidumbre sobre la continuidad de la ayuda humanitaria.
El Ministerio israelí de la Diáspora y la Lucha contra el Antisemitismo indicó que, de cerca de 100 solicitudes presentadas en meses recientes, solo 14 fueron rechazadas hasta finales de noviembre.
La dependencia señaló que Israel permite la acción humanitaria, pero mantiene controles para evitar que, bajo ese marco, se realicen actividades consideradas hostiles o vinculadas con terrorismo.
La asistencia que llega a Gaza continúa por debajo de los niveles previstos. Organismos humanitarios y Naciones Unidas reportaron que, pese a acuerdos que contemplaban el ingreso de 600 camiones diarios con ayuda, solo entre 100 y 300 han logrado acceder. El resto corresponde principalmente a mercancías comerciales a las que gran parte de la población no tiene acceso.
Naciones Unidas advirtió que, aunque la fase más grave de hambruna ha disminuido, persisten niveles elevados de inseguridad alimentaria y la situación sigue siendo delicada. En el ámbito sanitario, organizaciones internacionales sostienen una parte relevante de la infraestructura médica, incluyendo camas hospitalarias y centros de atención para menores con desnutrición.
Entre las ONG que no recibieron autorización se encuentran Save the Children y American Friends Service Committee, las cuales deberán retirar a su personal internacional en un plazo de 60 días y suspender el envío de ayuda. Además, enfrentan limitaciones para operar a través del sistema bancario israelí, necesario para cubrir gastos básicos. Agencias de la ONU y diversas organizaciones señalaron que el proceso de registro se basa en criterios poco claros y que la salida de estas ONG no podrá ser compensada en el corto plazo.
Actores humanitarios expresaron preocupación por el escenario previsto para inicios de 2026, ante el riesgo de que organizaciones sin experiencia en el territorio sustituyan a las que han operado durante años.







