Melissa Estefanía Vargas Camacho, diputada federal por el Distrito XXVII de Toluca, refirió que en el Congreso está en discusión la Ley de Economía Circular, que ya fue aprobada en el Senado y busca disminuir los residuos de la industria, las empresas y el comercio, así como una regulación de corte nacional para evitar la sobrerregulación en los estados y se replanteen los diseños de muchos de los empaques de los productos para evitar más contaminación.
“Si en un día justáramos la basura que se genera en el Estado de México y la Ciudad de México, podríamos llenar el Zócalo capitalino. En el país tenemos un problema serio en materia de residuos, que contaminan los riso y mares”.
Desde la Comisión del Medio Ambiente y Recursos Naturales del Congreso Federal, Vargas Camacho dijo que han escuchado a las cámaras empresariales de todo el país, a quienes se les ha planteado la necesidad que se asuman la responsabilidad compartida, es decir, que los usuarios, quienes comercializan y, especialmente, quienes producen los empaques, busquen alternativas que no prolongue su vida útil.
Durante su reunión con integrantes de la Asociación de Empresarios e Industriales del Estado de México (ADEIEM), indicó que hay países en el mundo que están exportando basura porque tienen una Ley de Economía Circular, donde todo se aprovecha para generar menos desechos.
“En México no es posible que sigamos teniendo productos para envolver una manzana, solo para comérsela”, esprezó la diputada.
Explicó que trabajan en el tema del agua y están buscando alternativas para que las empresas sean más productivas con menor cantidad de agua. Resaltó que el norte del país es el ejemplo más claro de lo que está pasando y ha llegado al ‘Día Cero’, es decir, sin agua.
“Se estima que la Ciudad de México y el Estado de México tiene 7 años para encontrarse en las mismas circunstancias que Nuevo León o Monterrey que ya viven la carencia del vital líquido, lo cual implica replantear la producción”, explicó Melissa.
Por esta situación aseveró el análisis de las reformas para el cuidado, reciclaje y reutilización del agua, lo mismo que la recopilación del agua de lluvia y las plantas tratadoras.
“De las 25 plantas tratadoras de agua que hay en Toluca por ejemplo, solo funciona una y hoy estamos tirando agua que puede ser utilizada para la industria, la limpieza y no vemos el tema que se nos avecina”.






