Fue trasladada en un convoy Carlota “N”, de 74 años, señalada como presunta responsable del homicidio de 2 personas y tentativa de homicidio de un menor de edad en el municipio de Chalco, derivado de una disputa por la propiedad de una vivienda.
También fueron trasladados Eduardo “N” y Mariana “N”, presuntos cómplices que aparecen en un video grabado por una de las integrantes de la familia que, según versiones, habría invadido el inmueble perteneciente a la adulta mayor.
Cerca de las 16:00 horas, Carlota “N” y sus hijos, Eduardo “N” y Mariana “N”, fueron ingresados al Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Chalco, Estado de México.
Bajo un fuerte dispositivo de seguridad, fueron trasladados por la carretera federal México–Puebla hasta el penal, donde finalmente quedaron bajo resguardo.
Se espera que esta noche pasen su primera estancia en el centro de reinserción, en las próximas horas, se lleve a cabo la audiencia inicial ante un juez de control.
Un juez de control del Poder Judicial del Estado de México tiene programada para hoy la audiencia inicial de Carlota “N” y sus 2 hijos, Mariana y Eduardo.
Serán presentados ante el juez de control, quien determinará la legalidad de su detención y decidirá la medida cautelar, es decir, si Carlota “N” enfrentará el proceso en libertad o permanecerá en prisión.
Aunque la audiencia aún no ha comenzado, se espera que se realice en las próximas horas.
En el Estado de México, el delito de homicidio está regulado por el Código Penal estatal, específicamente en su artículo 241, que define y establece las penas correspondientes.
“Se considera homicidio cualquier acto que prive de la vida a otra persona”, dice el texto.
El homicidio puede ser clasificado de dos maneras: simple o calificado.
El homicidio simple ocurre cuando no se presentan circunstancias especiales y es castigado con una pena de entre 10 y 15 años de prisión.
Por otro lado, el homicidio calificado se da cuando existen circunstancias específicas, tales como:
- Premeditación: cuando el crimen es llevado a cabo tras un proceso reflexivo previo.
- Ventaja: cuando el agresor no corre riesgo alguno de sufrir daño por parte de la víctima.
- Alevosía: cuando la víctima es sorprendida intencionalmente de forma inesperada o mediante acecho.
Cuando las autoridades logran acreditar la comisión de un homicidio calificado, la pena puede oscilar entre 40 y 70 años de prisión, e incluso, se puede imponer prisión vitalicia, dependiendo de la valoración del juez. Además, se establece una multa que va desde los 700 hasta los 5 mil días de salario.
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